La investigación en homeopatía se ha desarrollado al ritmo de los avances de las técnicas y métodos de experimentación.
Durante el siglo XIX se recogieron los primeros estudios de observación durante unas graves epidemias, en las que se pudo probar la nueva terapéutica (1832: epidemias de cólera en Burdeos y Nueva York, en Marsella el año 1854; fiebre amarilla en EEUU el año 1878).
Estas observaciones no tienen valor desde el punto de vista estadístico, pero permitieron utilizar los medicamentos homeopáticos en un gran número de pacientes, con el mismo tipo de patología grave.
En el siglo XX lo que abre realmente el camino a la investigación es el mejor conocimiento de la relación entre la materia y la energía, así como la estandarización de los procesos de fabricación de los medicamentos (lo que posibilita efectuar trabajos reproducibles, como exigen las autoridades sanitarias que autorizan los registros de medicamentos).
Los años cincuenta vieron aparecer diversos trabajos experimentales realizados por diversos laboratorios farmacéuticos en cooperación con universidades: tesis de medicina (Galy, 1952), ensayos clínicos (Lapp Ch., 1955). Unos años antes, en Gran Bretaña, durante la Segunda Guerra Mundial, se habían realizado otros ensayos clínicos según un método aceptable, llevados a cabo por homeópatas y farmacéuticos clínicos, Paterson informó de estos ensayos con enfermos que se habían visto expuestos al gas mostaza lanzado por los nazis sobre Londres, y que se habían tratado posteriormente con diluciones del mismo gas (Paterson, 1944). Este estudio fue posteriormente objeto de un detenido estudio estadístico (Owen, 1982).
Aunque existe una investigación en homeopatía dirigida a perfeccionar los sistemas de exploración del paciente y de la prescripción de los medicamentos homeopáticos, como no sigue las directrices de la investigación convencional no será comentada aquí. La siguiente exposición pretende proporcionar una visión sucinta del conjunto de trabajos de investigación más representativos relacionados con las diluciones infinitesimales: comenzará con la presentación de unos metaanálisis que han impulsado con fuerza el avance de la homeopatía en los últimos años, y seguirá la presentación de trabajos tanto en el campo de la investigación clínica como en el de la investigación fundamental.
Cuando se investiga con las diluciones infinitesimales lo que se pretende es mostrar la eficacia real de esos medicamentos: se trata de hacer una demostración, es decir, evidenciar que algo tiene una realidad, que tal tipo de sustancia, fabricada según las indicaciones de la Farmacopea, tiene una actividad reproducible en las circunstancias descritas. “La investigación clínica nos permite confirmar, la investigación fundamental nos permite comprender” (Belon P, 1999, b, p.42).
La investigación clínica ocupa un lugar central en el proceso de evaluación de los medicamentos homeopáticos, al igual que la observación clínica en medicina, ya que antes que cualquier teoría, es la clínica la que orienta la práctica médica. En homeopatía esta investigación clínica tiene por objeto probar tanto la eficacia de los medicamentos homeopáticos como del método de prescripción. A lo largo de los años estos estudios se han ido perfeccionando, por el impulso de los investigadores y los requerimientos de los comités de lectura de las revistas científicas en las que se presentan para su publicación.
Historia de la investigación en homeopatía, principales hitos.
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